El mundo empresarial está lleno de nuevas exigencias que constantemente obligan a las empresas a gestionar de manera más eficiente. Compras no es ajena a esta tendencia; es más, hoy el área juega un papel protagonista para la competitividad de las empresas. Para estar a la altura de las exigencias actuales y futuras, los compradores deben de estar formados y ser conscientes de su papel para aportar valor.
El grupo de Red Ganadera Caspe gestiona más de 70 millones de euros en sus compras, de las cuales un 75 % son comodities, y el resto se reparten en transportes, inversiones, servicios,… . Es sin lugar a dudas, el mayor capítulo de los costes de la empresa. Su gestión debe ser realizada por profesionales formados y con técnicas apropiadas para optimizar el resultado de su trabajo. Es por ello, por lo que el pasado mes de marzo Red Ganadera Caspe organizó un curso de Gestión de Compras, en el que participaron personas de las diferentes áreas de la organización.
El curso fue impartido por D. Miguel Benitez, vicepresidente de AERCE en Cataluña, que es la Asociación Española de Profesionales de Compras, Contratación y Aprovisionamientos, y que cuenta con más de 30 años de experiencia. Su principal misión es la de maximizar la rentabilidad de las Organizaciones a través de la función de compras y facilitar las herramientas para el desempeño de los Profesionales de Compras.
En el curso se habló de Herramientas como el SRM (Supplier Relationship Management), que nacen para potenciar la mejora de la comunicación con los distintos proveedores de la empresa, para compartir con ellos una metodología, términos comerciales e información y mejorar la familiaridad entre empresa y proveedores. En definitiva, imprimir transparencia en las transacciones para mejorar la competitividad.
Las relaciones con los proveedores están cambiando. El precio ha dejado de ser el único parámetro que tiene en cuenta un departamento de compras a la hora de elegir a sus proveedores. El trato preferencial, la disponibilidad, el acceso a la tecnología, la innovación o la reducción de riesgos a la hora de realizar una compra, son algunos de los aspectos que se valoran en la selección de proveedores, y que suponen un valor añadido para la mejora de los resultados de la compañía. Esta relación se vuelve más crítica si cabe con los proveedores de mayor nivel, aquellos que resultan estratégicos para el desarrollo del negocio. Es ahí cuando surgen herramientas como el SRM (Gestión de Relaciones con los Proveedores), para identificar qué proveedores son estratégicos dentro de la red de suministro global y poder aprovechar sus capacidades e innovación en la creación de valor.
Para que una acción como esta tenga éxito, lo principal es lograr una buena segmentación de proveedores, identificar aquellos que son estratégicos para el negocio, valorar la capacidad de producción y suministro y los riesgos que puede conllevar la decisión. Un proveedor estratégico debe de estar alineado con los valores y principios de nuestra compañía, tener capacidad de suministrar lo que se solicite en tiempo y con la calidad requerida cumpliendo todas nuestras especificaciones, contar con un equipo humano y técnico que haga viable la relación que deseamos y, por supuesto, estar interesado en establecer relaciones duraderas, transparentes y abierta con nosotros.
Otra de las calves principales después de la segmentación de los proveedores es la correcta integración de los equipos humanos y técnicos de ambas compañías que garantizará en gran parte el éxito del programa; así como de que todos los departamentos involucrados estén informados y tomen parte en la manera que les corresponda.
Entender la importancia de las herramientas necesarias en la gestión del riesgo en las compras de materias primas es vital para poder mitigar sus consecuencias de la volatilidad en el precio y la incertidumbre macroeconómica. Negociar sin tener en cuenta la situación de mercado o usando sólo estrategias de cobertura fija, puede conllevar un alto coste para algunas compañías.
En definitiva, la adecuada gestión de nuestros proveedores y la relación con ellos es imprescindible para garantizar el éxito y la competitividad empresarial del negocio, por lo tanto, la inversión de tiempo, presupuesto y esfuerzo humano y técnico, dará como resultado el fruto del éxito para nuestra compañía.